Acuerdo indemnizatorio que pone fin a un pleito con indemnización de 55.000 euros por los daños derivados de una septoplastia.
La cirugía de nariz (como es la septoplastia) tiene un fin funcional y estético; así hay quien se opera para respirar mejor y hay quien lo hace para corregir un defecto estético.
El problema es que como toda cirugía tiene sus riesgos, que hay que informar al paciente previamente, máxime si predomina el componente estético en la cirugía.
A veces se informa pero de forma incompleta, y en otras ocasiones se informa bien de inicio pero mal posteriormente; es lo que se denomina la información terapéutica.
En otras ocasiones el cirujano cambia la técnica quirúrgica sobre la marcha, asumiendo unos riesgos, porque esos cambios deberían estar previstos de antemano y consecuentemente informados.
Todo esto le pasó a nuestra clienta. Se reclamó, la compañía del seguro del otorrino hizo caso omiso. Se demandó y luego se opuso a la demanda.
Pero cuando se aproximó el juicio, a la vista del informe del perito judicial, aceptó un acuerdo que puso fin al litigio.
Un buen acuerdo. Más vale tarde que nunca.