50.000 euros tendrá que pagar a causa de esa secuela derivada de una intervención quirúrgica sencilla.
La sentencia del Juzgado de lo Contencioso-administrivo nº. 1 de Vigo no da pábulo a la explicaciones de POVISA conforme a que ese daño está contemplando en el consentimiento informado dado por la paciente, como riesgo propio de la intervención.
Nuestra clienta sufre en la zona de la herida quirúrgica un dolor que pese haber sido tratado en tres centros distintos no han sido capaces de quitárselo, lo que condiciona su vida diaria. Otra cosa es si esa indemnización repara el daño -que no compartimos, por lo que será objeto de un recurso-.
Habrá pues segunda parte. Esperemos que en contra del dicho cinematográfico en este caso sea buena (o sea, mayor indemnización que la concedida).